Cuando hablamos de particiones de disco, nos referimos a cómo se divide el espacio en un dispositivo de almacenamiento, como discos duros, unidades de estado sólido y unidades flash. Esta división es crucial para la organización de datos, ya que permite que el sistema operativo identifique y gestione el espacio de almacenamiento de manera eficiente. Generalmente, un disco puede tener una sola partición, pero en muchos casos, se crean múltiples particiones para diferentes propósitos, como el almacenamiento de sistemas operativos, archivos personales o aplicaciones.
La estructura de partición define cómo se organiza la información en el disco, marcando el inicio y el final de cada partición. Además, incluye el código utilizado durante el arranque si la partición es booteable. Aquellos que han particionado y formateado un disco, o configurado un Mac para dual boot con Windows, han tenido que lidiar con MBR y GPT, siendo este último el nuevo estándar que gradualmente reemplaza al primero.
Función de MBR y GPT
Antes de utilizar un disco, es necesario particionarlo, y aquí es donde entran en juego MBR (Master Boot Record) y GPT (GUID Partition Table). Ambos son métodos diferentes para almacenar la información de particionamiento en un disco. Esta información incluye la ubicación de inicio y fin de las particiones, lo que permite que el sistema operativo identifique qué sectores pertenecen a cada partición y cuál es booteable.
La elección entre MBR o GPT es crucial antes de crear particiones en un disco. Mientras que MBR ha sido el estándar durante décadas, GPT ofrece ventajas significativas que lo hacen más atractivo para los usuarios modernos. Por ejemplo, GPT permite un número casi ilimitado de particiones y es compatible con discos mucho más grandes, lo que lo convierte en una opción preferida para configuraciones de almacenamiento avanzadas.

Limitaciones de MBR
Introducido en 1983 con IBM PC DOS 2.0, MBR se denomina así porque es un sector de arranque especial ubicado al inicio del disco. Este sector contiene un cargador de arranque para el sistema operativo instalado y la información sobre las particiones lógicas del disco. Sin embargo, MBR tiene limitaciones significativas que pueden afectar su funcionalidad en sistemas modernos.
Una de las principales limitaciones de MBR es que solo es compatible con discos de hasta 2 TB. Además, soporta un máximo de cuatro particiones primarias. Si se requieren más particiones, es necesario crear una «partición extendida» y generar particiones lógicas dentro de ella, lo que se considera una solución poco práctica. Esto puede ser un inconveniente considerable para aquellos que necesitan gestionar múltiples sistemas operativos o grandes volúmenes de datos.
Ventajas de GPT
Por otro lado, GPT es un estándar más moderno que está reemplazando a MBR y está asociado con UEFI, que sustituye al antiguo BIOS. Cada partición en un disco GPT tiene un «identificador único global» (GUID), lo que garantiza que cada partición en el mundo tenga un identificador único. Esto no solo mejora la organización, sino que también facilita la gestión de particiones en sistemas complejos.
Una de las ventajas más destacadas de GPT es que no presenta las limitaciones de MBR. Los discos basados en GPT pueden ser mucho más grandes, con límites de tamaño que dependen del sistema operativo y sus sistemas de archivos. Además, GPT permite un número casi ilimitado de particiones; por ejemplo, Windows permite hasta 128 particiones en un disco GPT sin necesidad de crear particiones extendidas. Esto es especialmente útil para usuarios avanzados que requieren una gestión eficiente del espacio de almacenamiento.

Robustez y recuperación de datos en GPT
En contraste con MBR, donde los datos de particionamiento y arranque se almacenan en un solo lugar, GPT almacena múltiples copias de esta información en todo el disco. Esto lo hace más robusto y capaz de recuperarse de la corrupción de datos. GPT también utiliza valores de verificación de redundancia cíclica (CRC) para asegurar la integridad de sus datos. Si se detecta corrupción, GPT puede intentar recuperar la información dañada desde otra ubicación en el disco, algo que MBR no puede hacer, ya que no tiene forma de saber si sus datos están corruptos hasta que falla el proceso de arranque o desaparecen las particiones.
Esta capacidad de recuperación es una de las razones por las que muchos expertos recomiendan utilizar GPT al configurar un disco. La seguridad y la integridad de los datos son fundamentales, especialmente en entornos donde la pérdida de información puede tener consecuencias graves.
Compatibilidad entre MBR y GPT
Los discos GPT suelen incluir un «MBR protector», que indica que el disco GPT tiene una única partición que abarca todo el disco. Esto es útil para evitar que herramientas antiguas que solo pueden leer MBR confundan el disco GPT con un disco no particionado y sobrescriban sus datos. En otras palabras, el MBR protector protege los datos de GPT de ser sobrescritos.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que Windows solo puede arrancar desde un disco GPT en computadoras basadas en UEFI que ejecutan versiones de 64 bits de Windows 11, 10, 8, 7, Vista y sus versiones de servidor correspondientes. Todas las versiones de Windows pueden leer discos GPT y utilizarlos para almacenamiento de datos, aunque no pueden arrancar desde ellos sin UEFI. Otros sistemas operativos modernos, como Linux, también tienen soporte incorporado para GPT, y los Macs Intel de Apple han dejado de usar el esquema APT (Apple Partition Table) para adoptar GPT.

Recomendaciones para la elección entre MBR y GPT
Al considerar si utilizar MBR o GPT, es recomendable optar por GPT al configurar un disco, ya que es un estándar más moderno y robusto hacia el cual se dirigen todos los ordenadores. Sin embargo, si se necesita compatibilidad con sistemas antiguos, como la capacidad de arrancar Windows desde un disco en una computadora con BIOS tradicional, es necesario seguir utilizando MBR por el momento.
Es fundamental evaluar las necesidades específicas de almacenamiento y compatibilidad antes de tomar una decisión. Si planeas utilizar discos de gran capacidad o gestionar múltiples particiones, GPT es la opción más adecuada. Por otro lado, si trabajas con hardware más antiguo o necesitas mantener compatibilidad con sistemas que no soportan GPT, MBR puede ser la mejor elección.
Reflexiones finales sobre MBR y GPT
La elección entre MBR y GPT es un aspecto crucial en la gestión de discos y particiones. Mientras que MBR ha sido un estándar confiable durante muchos años, las ventajas de GPT lo convierten en la opción preferida para la mayoría de los usuarios modernos. Con su capacidad para manejar discos más grandes, un número casi ilimitado de particiones y características de recuperación de datos, GPT se posiciona como el futuro del particionamiento de discos.
Al final del día, la decisión dependerá de tus necesidades específicas y del entorno en el que trabajes. Asegúrate de considerar todos los factores antes de hacer tu elección, y no dudes en buscar más información si tienes dudas sobre cuál es la mejor opción para ti.
