Tesla ha decidido dar un giro audaz en su enfoque de conducción autónoma al reintroducir un modo de conducción que había sido eliminado hace algunos años. Este modo, conocido como «Mad Max», prometía un estilo de conducción mucho más agresivo que las configuraciones anteriores, lo que ha desatado un amplio debate sobre la seguridad y la regulación de los vehículos autónomos.
En un contexto donde las críticas hacia Tesla por su sistema de conducción autónoma han estado en aumento, la decisión de volver a activar el modo Mad Max plantea interrogantes no solo sobre la intención de la compañía, sino también sobre las implicaciones de seguridad que conlleva para sus usuarios y la comunidad en general.
La reintroducción del modo Mad Max en Tesla
En la última actualización de software de Tesla, la versión FSD v14.1.2, la compañía anunció el regreso del modo Mad Max, que se caracteriza por velocidades más altas y cambios de carril más frecuentes en comparación con el modo «Hurry». Este modo fue presentado inicialmente en los primeros días del Autopilot de Tesla, como un precursor de su actual modo de conducción autónoma completo.

Este regreso ha generado una mezcla de entusiasmo y preocupación, ya que los conductores que prefieren una experiencia de conducción más dinámica pueden verse tentados a activarlo. Sin embargo, es importante considerar las consecuencias que esto puede tener en la seguridad vial.
Controversias en torno a la conducción autónoma de Tesla
La reintroducción del modo Mad Max no ha pasado desapercibida, especialmente considerando que Tesla se enfrenta a múltiples demandas por homicidio culposo y presiones regulatorias. Informes recientes indican que vehículos Tesla han estado involucrados en incidentes como conducción en sentido contrario y pasos de peatones ignorados.
Entre los incidentes más notorios se encuentra el caso de un Tesla que casi atropella a un periodista. Este tipo de situaciones pone de relieve el dilema que enfrenta Tesla: la búsqueda de la innovación frente a las crecientes preocupaciones de seguridad.
La velocidad y los riesgos asociados con Mad Max
El modo Mad Max ha sido diseñado para ofrecer una experiencia de conducción más intensa, pero esta intensidad tiene su precio. Usuarios han reportado que los vehículos, al utilizar este modo, pueden exceder los límites de velocidad y no respetar las señales de alto, lo que plantea serios riesgos.
En este contexto, es fundamental que los conductores de Tesla sean conscientes de las funcionalidades y limitaciones del modo Mad Max. Al usar este modo, los conductores deben tener en cuenta los siguientes puntos:
- El aumento significativo de velocidad puede llevar a situaciones peligrosas.
- La frecuencia de cambios de carril puede resultar en maniobras inesperadas para otros conductores.
- La falta de respeto a las señales de tráfico puede acarrear sanciones y poner en peligro a los peatones.
Activando y desactivando el modo Mad Max
Para aquellos que desean experimentar el modo Mad Max, activarlo es un proceso simple. Sin embargo, es crucial que los usuarios estén informados sobre cómo desactivarlo en caso de que la conducción se vuelva peligrosa. Aquí hay una guía básica:
- Accede al menú de configuraciones de conducción en la pantalla principal de tu Tesla.
- Selecciona «Modos de conducción».
- Activa el modo «Mad Max» para comenzar a utilizarlo.
Para desactivarlo, simplemente sigue los mismos pasos y selecciona un modo de conducción más seguro. Estar preparado para cambiar de modo puede ser una cuestión de seguridad.
Perspectivas futuras sobre la conducción autónoma de Tesla
A medida que Tesla continúa desarrollando su tecnología de conducción autónoma, la reintroducción de modos como Mad Max plantea preguntas sobre el futuro de la regulación en este ámbito. Muchas voces en la industria sugieren que es esencial que se establezcan normas más claras para garantizar la seguridad de los conductores, pasajeros y peatones.
Además, la posibilidad de que Tesla licencie su tecnología de conducción autónoma a otros fabricantes de automóviles añade otro nivel de complejidad y responsabilidad. Si otras marcas adoptan esta tecnología, la necesidad de establecer estándares de seguridad se vuelve aún más imperativa.
La importancia de la responsabilidad del conductor
Finalmente, es vital recordar que, a pesar de los avances en la tecnología de conducción autónoma, la responsabilidad última recae en el conductor. Los usuarios de Tesla deben ser conscientes de que, aunque el sistema FSD puede ofrecer asistencia significativa, no reemplaza la necesidad de una conducción atenta y responsable.
Utilizar modos como Mad Max sin la debida precaución puede llevar a consecuencias graves, no solo para el conductor, sino también para otros usuarios de la carretera. Por lo tanto, siempre es recomendable seguir las directrices de seguridad y estar preparado para intervenir en cualquier momento si la situación lo requiere.